Un informe en la revista "Mittendrin" del Spitex por Claudia Weiss desde junio de 2018
En la pared situada detrás de Eva Jaisli hay un bastidor repleto de herramientas: destornilladores, llaves hexagonales y multiherramientas colgadas con precisión según su forma y color. Los productos de la empresa PB Swiss Tools del municipio de Wasen en Emmental son sinónimo de calidad suiza resistente, son precisos, prácticos y, además, elegantes. Calificativos que casan a la perfección con Jaisli, quien asumió la dirección de la empresa en 1997, el mismo año en el que se fundó Spitex Berna.
Esta esbelta mujer de 59 años desprende un entusiasmo arrollador y parece tener todo bajo control. Sonríe mientras sus ojos de un azul intenso brillan. «Siempre me ha gustado organizar y asumir responsabilidades», comenta. Nunca le ha costado sacar conclusiones a partir de análisis ni formular visiones, «y, afortunadamente, he sido bendecida con energía y salud».
Ambas le fueron necesarias cuando, tras finalizar su formación como maestra, cursó los estudios de psicología y trabajo social, realizó un máster en administración de empresas y un máster avanzado en marketing internacional, mientras de paso criaba a tres hijas y un hijo que, en la actualidad, ya tienen entre 23 y 32 años. «Seguí mis intereses», explica sencillamente. «Pero mientras mis hijos eran pequeños, volvía siempre a casa puntualmente a la hora anunciada. Para mí la fiabilidad dentro de la familia es igual de importante que en el trabajo».
Ya durante su época universitaria se dio cuenta de que las mujeres debían luchar para hacerse un sitio. Y es lo que hace desde entonces. En un sector tan claramente dominado por los hombres, de igual forma que Spitex lo está por las mujeres, esta empresaria impulsa con determinación a mujeres con potencial. Hace años que en PB Swiss Tools un tercio de los empleados son mujeres, y esto en todos los puestos. «Diversidad» es la palabra mágica de Jaisli: «jóvenes y mayores, hombres y mujeres: en equipos mixtos todos pueden contribuir con sus experiencias».
Rechaza las cuotas. Pero no para de observar que muchas mujeres presentan una forma de eficiencia y efectividad muy especial: «En las reuniones se ponen nerviosas si no se avanza. Es algo que no pueden permitirse: saben que hay otras tareas esperándoles, de modo que se distribuyen el tiempo automáticamente de un modo eficaz». Eva Jaisli es considerada un modelo a seguir por su modo de gerencia: en 2017 quedó tercera en la categoría «Empresaria del año».
Para ella, cuya empresa con 160 empleados fabrica anualmente 12 millones de herramientas, Spitex Berna, con su total de 4800 empleados y 1,88 millones de horas anuales de cuidados, «constituye un factor económico fundamental». Mucho más allá de las cifras de facturación: como empresaria es consciente de lo importante que es un buen cuidado cuando alguien está enfermo. «Obviamente ofrecemos días libres de atención remunerados o ayuda directa en caso de crisis. Pero para el cuidado necesitamos a Spitex».
Eva Jaisli descubrió de primera mano lo útil que resulta esta ayuda cuando su padre enfermó de gravedad y quería quedarse en su hogar a toda costa. «Gracias a Spitex pudo morir en casa. Es algo que todos agradecimos enormemente». Tras un breve silencio, nos habla de la «importancia cada vez mayor del ámbito de la atención extrahospitalaria, que aúna competencia social con efectividad». Como presidenta del consejo de administración del centro hospitalario Spital Emmental AG, es consciente de la importancia del seguimiento médico ambulatorio: «el hecho de que Spitex ayude a que las personas enfermas sean dadas de alta más rápidamente, a que se recuperen mejor en sus hogares y a que sus familiares puedan regresar antes a sus puestos de trabajo constituye un beneficio económico inestimable».
A primera vista, ambas empresas pueden parecer casi antagonistas, pero para PB Swiss Tools y Spitex cuentan valores similares. «Continuidad e innovación» son dos aspectos fundamentales para Eva Jaisli: lo bueno debe permanecer, pero solo quien se atreve a probar siempre algo nuevo avanzará. «Es algo que Spitex también debe hacer; a las tareas habituales se les suman continuamente nuevos retos».
Otra máxima es la calidad: tanto en un sector como en el otro, pronto surgen problemas cuando los empleados no dan todo de sí. Para que sus empleados puedan hacerlo, Jaisli ha implantado unas buenas condiciones laborales, conoce a todos ellos por su nombre, y se preocupa por la seguridad laboral, por el asesoramiento profesional y por la satisfacción laboral. «Esta satisfacción es más evidente cuando uno percibe que está haciendo una contribución significativa», comenta. Y añade con una sonrisa que los empleados de Spitex no han de buscar mucho para descubrir su "contribución significativa".
Eva Jaisli se coloca bien su chaqueta clara y se prepara para su siguiente cita, una ponencia. Ante el público hace declaraciones tan pulidas como «Compromiso total para con el liderazgo» o «Equilibrio entre éxito y realización». Podría resultar artificial si no fuera ella misma la que, día a día, se entrega por completo y se ocupa literalmente de todo. Las herramientas detrás de ella en la pared le pegan bien. Sencillas, prácticas y, a la vez, elegantes.